Símbolos
Shetlarianos
El GIMNASIO SHETLAND, queriendo resumir sus ideales y principios, adoptó una serie de símbolos que lo identifican de una manera única así:
La
bandera tricolor,
que guarda el azul profundo de la ternura, el rojo intenso del amor y el
blanco de la inmensidad de la inociencia infantil, entretejida con dos
letras que simbolizan, el lugar donde aprendemos a descubrir en la vida,
la alegría del saber.
Nuestro
Inglés,
aprendido desde bebés, con
la fuerza y la alegría de nuestra teacher Miss Lili, se queda en
canciones, historias y narraciones de los tiernos personajes de cuentos de hadas y príncipes.
Los
juegos,
eternos compañeros de la aventura y la fantasía, a través de los cuales
expresamos nuestros sentimientos y con los que viajamos a un mundo de sueños
que muchas veces podemos hacer realidad.
Las
llaves,
que mantienen las puertas de
nuestra Institución a disposición de quienes busquen un sitio cálido y
amoroso para explorar y desarrollar maravillosos proyectos educativos con
la guía de nuestros padres y profesoras.
El
libro,
amigo inseparable que guarda en su interior la magia del conocimiento y es
fuente inagotable de sabiduría y entretenimiento.
Nuestra
madre Celestial, la Virgen María,
dulce protectora de la infancia, que nos cubre con su manto y nos ilumina
con su amor y su bondad.
Una
rosa,
signo de la diáfana amistad que flotece y que perdurará como suave
fragancia de lealtad y solidaridad.
El
espíritu deportivo,
emblema de la competencia sana y el deseo de compartir inolvidables
eventos en nuestras alegres y especiales olimpiadas Shetlarianas.
Un árbol, recuerdo de la semilla del saber, que un día sembramos, cuidamos y cosechamos para recoger de él, los mejores frutos: Niños sensibles, respetuosos y responsables de construir día a día un mundo digno y acogedor.